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Mostrando entradas de noviembre, 2021

Piezas.

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    Poco a poco, con cada movimiento, las piezas van encontrando la manera de encajar. Cada una es necesaria y valiosa, cada una tiene su contribución.   Lo que me va dando forma son las piezas, los momentos y las vivencias.   Cada detalle guarda magia, cada memoria es testigo intangible de lo aprendido, lo disfrutado y lo padecido.    La historia alimentada con los días se tiñe entre luces y sombras. La balanza, al final, se inclina con la visión ganada o perdida entre el amanecer y la oscuridad.   Así, componiendo un todo, con cada pieza reunida me voy (de)construyendo de a poco. Texto: Kena Rosas. ©Todos los derechos reservados.

Hibernar.

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    Mi corazón que es un gorrión ha comenzado a envolverse con sus alas para mantener su calor frente al frío que llega.   El instinto sigue guiando a este corazón silvestre que no puede evitar su naturaleza.   Con el invierno que se acerca van llegando pensamientos y dudas. Me pregunto si mi corazón debe dosificar su pasión, o guardarla junto con la calidez antes de que su fuego se extinga sin poder derretir el hielo.   Quizá la pasión debería quedarse dormida, permanecer serena y apacible hasta el momento en que una chispa de inmenso gozo avive su capacidad de dar y amar.   ¿Y si la respuesta es poner a hibernar los sentimientos hasta que los despierte la primavera?   ¿Qué sucederá cuando se extinga el calor que mi corazón emite desde sus entrañas?   Retrocedo, busco alivio a mis dudas en el silencio.    Mi corazón dormita entre lo deseado y lo obtenido. Sus latidos detienen la ferocidad del desaliento.   Esta noche me refugio en ...

Unidad.

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    He retirado las manecillas del reloj intentando engañar al tiempo.   Me hacen falta tus palabras que se hilan a mi presencia a pesar de la distancia.   En cada línea derramo mi ser sobre ti y el lenguaje que solamente tú y yo conocemos cobra un sentido más profundo.   Necesito subir por tu piel y quedarme el tiempo que haga falta hasta pertenecer a tu tibieza.   En la unidad pronunciaré tu nombre y guardaré dulcemente tu mirada junto con el instante en que mi universo explote reflejado en tu iris.   Y ajenos al mundo, dormiremos sobre sábanas revueltas en nuestra habitación blanca iluminada por los rayos del sol. Texto: Kena Rosas. ©Todos los derechos reservados.

Lo desconocido.

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    A veces mis pensamientos no guardan lógica con mis sentimientos. Me pierdo en una telaraña repleta de recuerdos, vida y porvenir.   Dicen que la existencia es matemática pura y que todo se puede explicar encontrando la ecuación adecuada.   No me considero buena con los números, así que quizá por ese motivo no he encontrado el final de la telaraña para desenredar sus hilos y formar una madeja.    A veces temo que se me vaya la vida sin descubrir una pizca del sentido preciso de las cosas.   Quizá solamente dejaré que los verdaderos matemáticos descifren los misterios de lo intangible y expliquen las maravillas de la Naturaleza. Mientras eso ocurre, yo puedo soñar con comprender un poco de todo lo que el universo me dice.   Si me abandono al silencio quizá encontraré la voz que me indique el camino cuando me quieran devorar las dudas.   Pensaré menos en lo que no puedo explicar y disfrutaré más de lo que no requiere respuestas. Texto: Kena ...

Deseos y Perseidas.

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    Dicen que se requiere de valor para pedir un deseo pues se corre el riesgo de volverse realidad.   Los sueños y los deseos tienen su propia lógica y a veces se cumplen sin pedirlos con empeño.   Fabio y yo nos quedamos a esperar pacientemente las Perseidas. Su naturaleza imprevisible es parte de su belleza.   La luminosidad de la ciudad impide apreciar la noche, pero Fabio conocía el lugar perfecto para ver aquel despliegue de estrellas.    El cielo parecía casi alcanzable con las manos. Al ver la luna y las constelaciones supe que nuestro viaje de tres horas por carretera había valido la pena.   Yo tenía guardando un puñado de deseos para lanzarlos a las estrellas fugaces antes de verlas morir en la oscuridad.    Mis deseos eran de lo más "normales": felicidad, esperanza, salud, amor, pasiones y prosperidad.   Esperando la llegada de la estrellas comprendí que aquellos "deseos comunes" son más profundos de lo que parecen pues t...

Polvo.

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    Las mañanas dejaron de ser cálidas. Lentamente va descendiendo la temperatura y ni el sol enmarcado en el cielo despejado consigue alejar al viento frío.   Frente al monitor exploro viejos archivos llenos de fotografías de otro tiempo y de mundos pasados que en mi historia no lograron sobrevivir.   Pienso en esas personas con las que compartí amor y tiempo. Algunas siguen en mi presente, pero con aquellos que ya no están tuve momentos que hoy me parecen escasos.   Entre mi archivo del pasado he encontrado una carta firmada con las iniciales JM. No recordaba esa carta en la que me cuenta un poco de su día y dedica algunas palabras de cariño profundo. Nuestra historia transcurrió a lo largo de muchos años y estuvo escrita entre ausencias y reencuentros improvisados. Con él descubrí que el corazón también se cansa de esperar.   Hoy, con la distancia que han marcado los años agradezco lo vivido y dejo ir todo aquello que se ha convertido en polvo acumulado....

Inmune.

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    Hace unos años la psicóloga con la que tomaba terapia me explicó sobre la importancia de nombrar y reconocer cada una de mis emociones. Mencionó que en general se les agrupa en seis: sorpresa, asco, tristeza, ira, miedo, alegría (felicidad) y amor.    Comenzar a explorar mi corazón no fue una tarea sencilla pues estaba muy mal acostumbrada a reprimir las emociones negativas. Aprendí a nombrarlas y a aceptar que son parte de los claroscuros que me conforman. No soy exactamente una persona en equilibrio permanente.   Siempre he pensado que el amor es de los pilares esenciales de mi vida. Con amor me entrego, con empatía intento comprender a los demás y con paciencia aprendo a escuchar.   Descubrí que no todo el amor que siento es correspondido, pero el hecho de sentirlo también me ha ayudado a sanar y enfrentar el dolor o la angustia de ciertos días.   Con el tiempo aprendí a expresar el amor de una manera más profunda y como un reflejo fiel de mi se...