Deseo.
Cierra los ojos y encuéntrame bajo la sombra de los sicómoros. Observa la manera en la que aparezco, caminando desde la distancia hasta detenerme frente a ti.
Llévame de la mano a la casa de cimientos fuertes que hemos levantado.
Yo, bajo este lado del cielo, también cierro mis ojos pensando en ti.
Soñaré con esa casa y sus habitaciones. Me quedaré dormida imaginando que me arropas en tus brazos para que no sienta frío.
Deseo tus manos, saborear tus besos, recorrer tu cuerpo y disfrutar tu piel.
Por favor, graba en tu mente este instante por si algún día me vuelvo solamente un recuerdo.
Texto: Kena Rosas.
©Todos los derechos reservados.
O desejo é um vento, esta em todo o lugar, sempre!
ResponderEliminarGostei!
O desejo flutua sobre nós. Tenha uma boa semana.
Eliminarcuanta angustia y sufrimiento La vida no eso eso no es amor
ResponderEliminarA veces la distancia es una tortura... y queda la esperanza de un nuevo encuentro. Muchas gracias por visitar el blog. ¡Saludos!
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