Cimientos.

 



  Si, como dicen, el alma está dividida en siete fragmentos que pueden estar al mismo tiempo encarnados o no, ¿por qué no pensar que, a lo largo de mi paso por el mundo, puedo renacer en esta vida gracias a la acumulación de experiencias, amor y conocimiento? 

  He comprobado hasta qué punto los cimientos de mi alma resisten y hasta dónde son sólidas  las estructuras. 

  Hoy disfruto de cierta paz al saber el sitio en el que se encuentra el fragmento más importante de mi ser.



Texto: Kena Rosas.

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